El disco de Phaistos fue descubierto el 3 de julio de 1908 durante la excavación arqueológica del antiguo palacio de Minos en Phaistos, en el sur de la isla de Creta (Grecia). Es un disco de arcilla, de unos 16 cm de diámetro, que presenta dos caras grabadas por escrituras subrayadas por una línea curva en forma de espiral desde el borde hasta el centro del disco. Las escrituras representan un total de 241 letras o símbolos agrupados a su vez, separados entre sí por líneas verticales, en 45 grupos de símbolos que parecen representar más un silabario que un alfabeto. Se estima que data del año 1.700 a.C.
A día de hoy lo que aparece escrito en El Disco de Phaistos sigue sin descifrar, pues no se parece a ninguno de los sistemas de escritura conocidos del mundo. Pero lo que sí afirman arqueólogos e historiadores es que se trata del primer documento escrito del mundo.
Sus símbolos no están grabados a mano sino que fueron impresos en arcilla blanda, posteriormente endurecida al horno por cocción, por medio de sellos. De este modo los “impresores” de la época podían reproducir escritos mediante la utilización de ese juego de 45 sellos; imprimiendo no sobre papel, lo que tuvo lugar en China 2.500 años después, sino sobre discos de arcilla. Hasta el momento no se ha encontrado ese juego de sellos ni más documentos como el Disco de Phaistos; si bien éste último puede verse expuesto en la actualidad en el museo de Heraklion, capital de la isla de Creta.
Aunque al pensar en “actualidad” es probable que lo primero que nos venga a la cabeza no sea el Disco de Phaistos…. merece la pena destacar lo que se puede considerar como la primera manifestación de las artes gráficas.
Con este primer post queremos conmemorar una profesión, remontándonos a su origen, rodeado aún hoy en día de tanto misterio. Y por qué no… ofrecer una pequeña excusa para visitar la isla de Creta. ¡Esperamos que os guste!
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